La cultura organizacional de una compañía es la base para tener un ambiente de trabajo cómodo y agradable, en el que el talento humano pueda desenvolverse asegurando excelentes resultados para el negocio.
Cuando las condiciones laborales no son buenas, la productividad disminuye. Los trabajadores no están contentos y lo hacen notar en su rendimiento. En consecuencia, la compañía pierde eficiencia en sus procesos. Para contrarrestar este escenario, desarrollar una buena cultura organizacional es muy importante.
Pero, ¿qué es la cultura organizacional? ¿Cómo implementar buenas prácticas para fortalecer el desarrollo de los colaboradores? En esta nota, definiremos este concepto a profundidad, revisaremos sus funciones y su importancia. Para finalizar, compartiremos te explicaremos cómo desarrollar una cultura organizacional orientada a las personas.
¿Qué es la cultura organizacional?
De acuerdo al blog de Hubspot, el concepto de cultura organizacional nos indica que es el conjunto de creencias, valores y prácticas que comparte un grupo de personas, las cuales los llevan hacia una misma meta.
Sumado a ello, podemos decir que la cultura en una empresa es una pieza estratégica para dar forma a la filosofía de cada compañía, y así guiarla hacia el éxito.
Ahora bien, ¿qué dicen los expertos sobre el tema? Según Chiavenato, la cultura organizacional también representa lo siguiente:
- Normas informales que, a pesar de no estar escritas, orientan el comportamiento de los miembros de una organización.
- Conjunto de hábitos y creencias establecidas por medio de normas, valores, actitudes y expectativas compartidas por todos los miembros del negocio.
- Mentalidad que predomina en una empresa.
- Patrón de aspectos básicos de comportamiento que funcionan bien en una organización y son establecidos como el parámetro de conducta deseable para los nuevos trabajadores.
En resumen, ¿qué es la cultura organizacional? Nos queda claro que la definición de cultura en una organización hace referencia a los componentes visibles (estructura, cargos, métodos de trabajo) e invisibles (valores, expectativas, normas) que siguen todos sus integrantes, sin importar el puesto, para potenciar su crecimiento y desarrollo.
¿Cuáles son los elementos de la cultura organizacional?
En el libro “Cultura Organizacional” de Chiavenato, el autor establece 6 características principales de la cultura en una empresa. Estos aspectos son una combinación de pautas que representan el modo de trabajar de la organización.
A continuación, te describimos una por una las elementos de la cultura organizacional:
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- Regularidades de comportamiento: son las formas de interactuar entre los colaboradores. Usualmente, se trata de un lenguaje común, terminologías propias y conductas similares.
- Normas: patrones de comportamiento que definen cómo hacer las cosas en la empresa.
- Valores dominantes: lista de valores que la empresa establece y cada uno de los trabajadores debe interiorizar.
- Filosofía: políticas relacionadas a la forma en que los empleados y los clientes deben ser tratados por la organización.
- Reglas: guías establecidas y relacionadas con el comportamiento en la organización. Todos los nuevos miembros deben adoptarlas.
- Clima organizacional: sentimiento transmitido por el local físico. Determina la forma de trabajar de las personas y cómo se relacionan con terceros.
Aunque no son pocos, definir cada uno de estos puntos es necesario para crear una cultura corporativa consistente. Además, estas características son fundamentales para transformar de manera integral tu organización.
Si lo consideras necesario, puedes reunirte con algunos miembros de tu equipo para construir, entre todos, cada uno de los elementos de la cultura corporativa. Así, podrás tomar en cuenta diversos puntos de vista y hacer que la transformación del negocio sea aún más efectiva.
¿Cuáles son los tipos de cultura organizacional?
Para seguir profundizando en el concepto de cultura organizacional, consideramos importante hablar sobre sus tipos.
¡Así es! La cultura corporativa puede tomar diferentes enfoques según los objetivos de cada organización. Veamos los tipos de cultura organizacional más comunes:
Cultura organizacional de clan
El primer enfoque considera a los empleados como la extensión de la unidad familiar. Aquello significa que todos deberán asumir determinados factores y actitudes como valores y objetivos, para así promover el trabajo colaborativo.
Dentro de las ventajas de la cultura organizacional de clan encontramos que aumenta el nivel de compromiso y el sentido de pertenencia, mientras que mejora el clima laboral. Sin embargo, suelen existir complicaciones en términos de productividad cuando las políticas implementadas son muy flexibles.
Cultura organizacional de adhocracia
En una cultura organizacional adhocrática, los líderes actúan como promotores de una actitud permeable frente a los cambios y los nuevos retos. Por ello, siempre deben incentivar a los trabajadores a innovar en sus procesos de trabajo.
¿Qué hay de las ventajas y desventajas de este tipo de cultura organizacional? Por un lado, existe mucha flexibilidad, productividad y creatividad. Por otro lado, las exigencias de innovación constantes pueden aumentar los niveles de estrés de los colaboradores. Incluso, pueden incrementar la competencia interna de forma poco saludable.
Cultura organizacional de jerárquica
Se trata del tipo de cultura organizacional más formal o tradicional de la lista. El objetivo de este enfoque es armar una jerarquía clara entre los miembros de la empresa, de modo que todos conocerán cómo está compuesta la dirección y quiénes toman las decisiones.
Entre los beneficios de implementar una cultura organizacional jerárquica, encontramos que podemos generar mayor coordinación, planificación y estabilidad. En cuanto a las desventajas, existe el riesgo de caer en una cultura de control o de micromanagement —que es una supervisión muy estricta—. Aquello promueve la fuga de talento.
Cultura organizacional de mercado
También conocido como cultura organizacional orientada a resultados, este enfoque prioriza los objetivos a lograr más que las acciones que toman los colaboradores en su día a día. Suele ser una política muy flexible, ya que trata de dar mucha autonomía al talento humano con el fin de que se sientan cómodos haciendo su trabajo.
La desventaja de este tipo de cultura organizacional es que puede generar estrés en los profesionales, además de una baja productividad, si no es implementada correctamente. Para evitar ello, es recomendable que los líderes muestren predisposición para apoyar a los colaboradores siempre que lo necesiten.
¿Por qué es importante la cultura organizacional en las empresas?
Luego de haber ahondado en el concepto de cultura organizacional, estamos seguros de que puedes reconocer la importancia que tiene en las empresas.
Desarrollar una cultura organizacional orientada a las personas es clave para tener un negocio exitoso, sobre todo por las funciones que cumple en él. A continuación, revisaremos cada una a detalle:
Fomenta la colaboración entre equipos y líderes
Una buena cultura organizacional actúa como apoyo para los colaboradores. Recordemos que ellos quieren sentirse respaldados por los líderes en todo momento. Demostrarles que nos preocupamos por su bienestar es una excelente forma de mejorar la relación entre ambas partes.
Con el tiempo, veremos un equipo motivado y decidido a dar lo mejor de sí para alcanzar buenos resultados.
Promueve la estabilidad
Tal como hemos visto previamente, la cultura organizacional representa las normas, reglas y pautas que deben seguir los miembros de una empresa para asegurar que la convivencia sea la mejor.
Gracias a estos parámetros que intervienen en la cultura organizacional, cada colaborador sabe cómo comportarse para alcanzar las metas de la organización sin interferir con sus compañeros o líderes.
Ayuda a definir objetivos claros
Las personas necesitan tener claridad en los procesos para hacer un buen trabajo; de lo contrario, es común que surjan dudas y contratiempos en el camino. La cultura en las empresas nace a partir de la definición de todas las normas de conducta y de la filosofía corporativa.
Ambos aspectos son la guía perfecta para establecer objetivos o metas con claridad, sin perder de vista la visión y misión de la compañía.
¿Cómo implementar una buena cultura organizacional en tu empresa?
No podíamos finalizar el artículo de hoy sin una guía paso a paso para transformar la cultura corporativa en tu empresa.
Veamos qué debes hacer para crear un ambiente seguro en tu empresa, que sea propicio para transformar las habilidades del talento humano:
1. Conoce a tu empresa
Comencemos descubriendo qué es lo que quiere proyectar tu empresa al exterior. Puedes resolver las siguientes preguntas para tener una idea más clara:
- ¿Cuál es la esencia de la organización que has construído?
- ¿Por qué existe la empresa?
- ¿Qué impacto quieres generar en el entorno?
- ¿Cómo piensas actuar para alcanzar tus metas?
Así, poco a poco podrás definir la personalidad de la compañía. Esta es la base para estructurar los elementos de la cultura organizacional que siguen con coherencia y sin perder de vista el “norte” de la misma. Recuerda que cada uno de esos aspectos nos ayudan a alcanzar en conjunto un objetivo común.
2. Construye los elementos de la cultura organizacional
¿Recuerdas cuáles son los elementos de la cultura corporativa? Aquí te dejamos la lista que revisemos algunos apartados atrás:
- Regularidades de comportamiento
- Normas
- Valores dominantes
- Filosofía
- Reglas
- Clima organizacional
Para construir una cultura organizacional que cambie el rumbo de tu empresa de forma favorable, procura que cada elemento tenga relación con el perfil de tu empresa, el cual definimos en el paso anterior.
¿Cómo redactar correctamente estas características de la cultura organizacional? Te recomendamos ser claro y conciso. No des muchas vueltas al definir cada aspecto o podrías crear confusiones.
3. Haz una comparación con la situación actual
Bien, ahora que ya conoces el perfil de tu empresa y has definido las características de la cultura organizacional que quieres desarrollar, es momento de hacer un análisis. ¿Cuál es la situación actual de tu empresa? ¿La cultura es la misma que quieres proyectar?
Anota todas las diferencias, incluso las que parecen insignificantes. Todo esto te ayudará a hacer las mejoras pertinentes en cada caso.
4. Realiza los cambios necesarios
¡Llegó la hora de tomar acción! El blog de Rock Content nos recomienda permanecer abiertos al cambio durante todo el proceso de definición de la cultura organizacional. Sobre todo, si tenemos en cuenta que muchas de las políticas antiguas corren el riesgo de perder efectividad.
Para evitar comprometer los niveles de productividad, es necesario ajustar todas las diferencias que encontramos entre el escenario ideal y el actual. Solo así podrás aprovechar las ventajas de la cultura organizacional.
5. Comunica las nuevas bases de la cultura en tu organización
Una vez que hayas realizado todos los cambios en el paso anterior, debes comunicarlos a todos los miembros de la empresa. Tanto el personal como los líderes tienen que estar al tanto de las nuevas formas de interactuar para que el nuevo enfoque de la cultura organizacional se haga efectivo; de lo contrario, la convivencia será la misma.
Por lo tanto, ya sea que hayas cambiado el reglamento interno de trabajo, las normas de convivencia o cualquier otro aspecto, asegúrate de mencionarlos por todos los canales de tu empresa para que el equipo sepa de ellos.
6. Ajusta el proceso de contratación
Para finalizar, es necesario mencionar que, a partir de ahora, tienes que ajustar el proceso de selección para incorporar a tu compañía los perfiles profesionales que están alineados con tu nueva filosofía.
Recuerda que las personas son quienes se van a encargar de mantener viva la esencia de la organización. Si no siguen las normas ni se alinean a los nuevos valores delimitados en la cultura organizacional, esta se debilita y pierde peso. A largo plazo, los cambios generados no se aprovecharán tanto como deberían y el esfuerzo habrá sido en vano.
¡Bien! Este ha sido el artículo de hoy. Ahora ya sabes qué es la cultura organizacional y cómo puedes implementarla en tu empresa. A lo largo de la nota, hemos revisado la importancia del concepto en los negocios, sobre todo para asegurar un buen rendimiento a largo plazo.
Recordemos que la cultura organizacional define el rumbo que las compañías deben seguir para alcanzar una meta en conjunto. Todos los procesos, valores, reglas, entre otros elementos definidos, son los que van actuar como base para crear un equipo sólido y listo para enfrentar cualquier situación.
Sigue los pasos y pautas que hemos definido en esta guía para empezar a trazar el camino hacia el éxito.
¡Hasta pronto!